
El terror se apoderó del centro de Bogotá en la noche del jueves 13 de marzo, cuando un ataque con granada dejó un saldo de tres muertos y al menos diez personas heridas. El atentado ocurrió cerca de las 9:00 p.m. en la intersección de la carrera Décima con calle Cuarta, en una zona de alta concurrencia, causando pánico entre los transeúntes y comerciantes del sector.
Según testigos, dos hombres a bordo de una motocicleta arrojaron el artefacto explosivo y huyeron rápidamente, dejando una escena de caos y destrucción. Los cuerpos de emergencia y la Policía Metropolitana de Bogotá llegaron minutos después, acordonando la zona y auxiliando a las víctimas.
“Fue una explosión muy fuerte. La gente salió corriendo, gritando y buscando refugio. En el suelo quedaron varias personas heridas, algunas gravemente”, relató un comerciante de la zona.
Entre los heridos hay varias personas en estado crítico, lo que podría aumentar la cifra de víctimas fatales en las próximas horas.
Las primeras hipótesis apuntan a que el ataque estaría relacionado con una disputa entre bandas criminales que operan en el barrio San Bernardo, un sector históricamente afectado por el narcotráfico y la delincuencia. Se investiga si el atentado fue parte de una retaliación entre grupos ilegales que controlan el tráfico de drogas en la zona.
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, condenó el hecho y aseguró que las autoridades ya están tras la pista de los responsables. “Este atentado es una muestra de la guerra que las bandas criminales han desatado en la ciudad, pero no permitiremos que se adueñen de Bogotá. Vamos a tomar medidas drásticas para frenar esta violencia”, declaró el mandatario local.
Tras la explosión, la Policía Nacional y el Ejército aumentaron la seguridad en el centro de la ciudad, con más patrullajes y puestos de control para evitar nuevos atentados.
El presidente Gustavo Petro también se pronunció, asegurando que el Gobierno Nacional apoyará todas las acciones necesarias para desmantelar las estructuras criminales responsables de este ataque.
Mientras la ciudad intenta reponerse del impacto de este atentado, los bogotanos exigen respuestas y mayor seguridad en las calles. La investigación sigue en curso y se espera que en las próximas horas las autoridades revelen avances sobre la captura de los responsables.
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