La senadora María Fernanda Cabal, una de las voces más visibles de la derecha en Colombia y precandidata con aspiraciones presidenciales, ha comenzado a mover fichas para enfrentar los señalamientos de la viuda de Miguel Uribe Turbay, quien la responsabilizó de haber utilizado políticamente la tragedia que rodea a su familia. El cruce de acusaciones ha escalado en los últimos días, lo que obligó a la congresista a activar una estrategia de defensa mediática y política.

Fuentes cercanas a Cabal aseguran que la senadora ha decidido dar un giro en su discurso frente a este caso, procurando mostrarse como víctima de una “persecución calculada” que busca deslegitimarla en un momento clave para su proyección hacia 2026. Según su entorno, la legisladora estaría enfocando su estrategia en dos frentes: por un lado, insistir en que sus posturas siempre han sido de carácter político y no personal; y por otro, posicionar la idea de que los cuestionamientos hacen parte de un intento por minar a la oposición en medio del clima polarizado del país.

Cabal, fiel a su estilo frontal, ha usado sus redes sociales para contrarrestar las críticas, resaltando que su papel como dirigente política la obliga a pronunciarse sobre hechos que considera relevantes para el rumbo de la nación. En sus publicaciones recientes, ha insistido en que los ataques provienen de sectores que buscan “silenciar la verdad” y frenar la consolidación de un proyecto político de derecha que, según ella, representa la única alternativa frente al progresismo de Gustavo Petro y sus aliados.

La viuda de Uribe Turbay, sin embargo, ha mantenido su posición y ha reiterado que los pronunciamientos de Cabal son dolorosos y oportunistas. Sus palabras han encontrado eco en parte de la opinión pública, que percibe en la senadora un tono desafiante incluso en temas que involucran sensibilidad personal y familiar.

En este contexto, la apuesta de Cabal no solo es responder al señalamiento puntual, sino también evitar que la polémica erosione su imagen en vísperas de un escenario electoral que ya empieza a configurarse. Analistas señalan que la senadora busca darle la vuelta a la controversia, proyectándose como una mujer firme, capaz de soportar ataques y de mantenerse en pie en un escenario político donde los cuestionamientos y confrontaciones son inevitables.

Lo que ocurra en las próximas semanas será clave para determinar si la estrategia de Cabal logra contener los efectos de la polémica o si, por el contrario, las críticas se convierten en un lastre que debilite su aspiración presidencial.